Observa cómo se comporta.
Resultados según la posición del huevo:
Posición del huevo Estado de frescura ¿Es seguro consumirlo?
Se hunde y queda acostado en el fondo Muy fresco  Sí, ideal para cualquier uso
Se hunde pero queda de pie (vertical) Aún bueno, pero no tan fresco  Sí, mejor para huevos cocidos
Flota en el agua Viejo o en mal estado  No, ¡descártalo inmediatamente!
¿Por qué flota el huevo viejo?
Con el paso de los días, el huevo pierde humedad a través de la cáscara porosa, y se forma una cámara de aire interna. Cuanto más aire contiene, más liviano se vuelve, y por eso flota.
Prueba del olor: el instinto nunca falla
Otra forma muy precisa es abrir el huevo y olerlo. El huevo en mal estado emite un olor fuerte, desagradable y sulfuroso, muy fácil de identificar. Si tienes dudas después de la prueba del agua, rompe el huevo en un recipiente separado antes de mezclarlo con otros ingredientes.
¡Nunca lo huelas directamente desde la cáscara! Si está podrido, el olor será muy penetrante.
Prueba visual: lo que tus ojos pueden decirte
Cuando abras el huevo, observa:
La yema debe estar redonda, abultada y de color uniforme.
La clara debe ser densa y gelatinosa, especialmente cerca de la yema.
Si la yema está rota o muy plana, y la clara es totalmente líquida, probablemente el huevo ya no está fresco.
Si ves manchas negras, verdes o de color extraño: ¡tíralo!
 
					